Sydney McLaughlin rompe el récord del mundo de 400 vallas
Primera mujer de la historia que rompe la barrera de los 52 segundos
La estadounidense Sydney McLaughlin batió el récord del mundo de los 400 metros vallas durante la última jornada de los Trials USA en Eugene (Oregon) al dar la vuelta a la pista en 51.90, convirtiéndose en la primera mujer que baja de los 52 segundos. La anterior plusmarca, en poder de Dalilah Muhammad, campeona olímpica y mundial, que fue segunda en esta carrera, estaba en 52.16 desde los Mundiales de Doha 2019.
El inequívoco gesto de echarse la mano a la boca al ver el registro ya fue señal de la dimensión de lo que había ocurrido. Era el primer récord mundial de una atleta de 21 años, que ya había provocado una revolución hace cinco años en los Trials que conducían a Río de Janeiro cuando ganó la plaza a los 16 años convirtiéndose en la atleta más joven que participaba en el equipo estadounidense de atletismo. Aún estaba en el último curso de un instituto católico de Nueva Jersey.
Muhammad dominó la carrera hasta la recta de meta, pero en la valla 9 fue cuando McLaughlin puso un punto más de velocidad para abrir hueco en los últimos 50 metros y arrojando una secuencia insólita en el deporte: en tres últimas de las últimas cuatro veces que se han enfrentado ambas atletas se han batido tres récords mundiales: en los Nacionales de Des Moines de 2019 (52.20 para Muhammad), en los Mundiales de Doha 2019 (52.16). Se intercaló el meeting de Zúrich donde ganó McLaughlin.
El récord mundial encumbra por fin a la atleta que quemó etapas en la niñez a una velocidad vertiginosa. Suyos son todos los récords mundiales de edad desde los 14 años, momento en el que aún siendo estudiante de secundario corrió en 55.63, tan rápido que no era lo suficientemente mayor para ser seleccionada para el Mundial juvenil -la primera gran cita atlética en una trayectoria- por ser un año menor. Su crecimiento fue constante hasta los Trials de 2016 donde se dio a conocer al mundo. En Río cayó en semifinales.
Hija de un velocista, Willie, que también alcanzó la penúltima ronda olímpica en Los Ángeles 84, con su madre Mary velocista, su carrera hasta el profesionalismo -donde dicen que ya cobra más de un millón de dólares de New Balance y también es imagen de Gatorade y Tag Heuer- se condujo a través de la Universidad de Kentucky. Allí sólo aguantó dos años, a pesar de ser uno de los campus más prestigiosos de Estados Unidos en vallas, por el que han pasado Kendra Harrison, plusmarquista mundial de 100 vallas; el jamaicano Omar McLeod, Jasmine Quinn o Daniel Roberts. Ahora se entrena con Bob Kersee, quien, además de a su mujer Jackie Joyner, guió las carreras de atletas como Allyson Felix, Florence Griffith o Gail Devers. Promete ser una de las estrellas de los Juegos de Tokio
Por: Martha Camina
Fuente: marca.com
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